Columpiarse es el clásico juego de
niños que nunca pasa de moda, ni siquiera en la era digital. Prácticamente
ningún niño puede resistirse a la tentación de subirse en un columpio nada más
verlo. Elevarse por los aires con todas sus ansias, fuerzas y sentir la
sensación de casi despegar: a muchos adultos les gusta aún columpiarse e,
incluso al recordar su infancia, saben exactamente cómo era su columpio de
aquel entonces.
Por esta razón, el columpio es uno de los imprescindibles de la gama de productos Wickey y está disponible en diferentes modelos. Este elemento de juego satisface una necesidad básica para los niños, aunque éstos no lo puedan explicar de forma consciente con sus propias palabras. Al columpiarse, sus hijos toman conciencia de sí mismos de una forma muy intensa y experimentan una sensación de aparente ingravidez, lo que les divierte enormemente. El viejo sueño de volar que tenemos los humanos entra también aquí un poco en juego. Al columpiarse, los niños tienen la sensación de despegar de tierra firme y estar un poco más cerca del cielo.
Además, a los niños les gusta jugar de forma que sus capacidades se ejerciten y se vean fortalecidas. Esto lo hacen de forma inconsciente, pues simplemente se divierten con lo que hacen. Los movimientos que son necesarios realizar al montar en un columpio, fomentan el sentido del equilibrio y la consciencia de uno mismo en los niños: ejercitan su sensación corporal y su seguridad. Sin que la pedagogía pueda explicarlo, los niños hacen de forma automática lo correcto, ya que nada fortalece tanto su equilibrio y la percepción de sí mismos como el acto de columpiarse. Usted lo diría de otra forma: columpiarse es divertido y nos hace volar.
Los columpios Wickey son el elemento de juego perfecto para sus hijos, ya que cubrirán sus necesidades básicas, son de la mejor calidad y han sido fabricados de manera resistente y ergonómicamente a la justa medida de sus hijos. Los productos Wickey cumplen todos los requisitos de seguridad y calidad exigidos por la normativa DIN, lo que hace que cada uno de sus columpios no solo proporcione la máxima diversión, sino también la máxima seguridad y durabilidad.
En cuanto a asientos para columpio, Wickey les ofrece una amplia variedad de asientos para niños de todas las edades y con las más variopintas ideas de juego, ya sea el clásico asiento rectangular, el trapecio para los futuros gimnastas o un asiento plato para columpiarse vehemente en todas direcciones. La variedad de productos Wickey hacen del acto de columpiarse mucho más que un simple balanceo hacia delante y hacia atrás: los niños son creativos y tienen siempre nuevas ideas y, los columpios Wickey, satisfacen siempre estas necesidades. Para que sus hijos disfruten de su columpio en la compañía de sus amigos, Wickey nos trae también los columpios dobles, en los que sus hijos podrán compartir la extraordinaria sensación de volar con su mejor amigo.
El columpio es el elemento de juego clásico para divertirse al aire libre: con los columpios Wickey, sus hijos podrán disfrutar cada día del maravilloso placer de balancearse por los aires.
Por esta razón, el columpio es uno de los imprescindibles de la gama de productos Wickey y está disponible en diferentes modelos. Este elemento de juego satisface una necesidad básica para los niños, aunque éstos no lo puedan explicar de forma consciente con sus propias palabras. Al columpiarse, sus hijos toman conciencia de sí mismos de una forma muy intensa y experimentan una sensación de aparente ingravidez, lo que les divierte enormemente. El viejo sueño de volar que tenemos los humanos entra también aquí un poco en juego. Al columpiarse, los niños tienen la sensación de despegar de tierra firme y estar un poco más cerca del cielo.
Además, a los niños les gusta jugar de forma que sus capacidades se ejerciten y se vean fortalecidas. Esto lo hacen de forma inconsciente, pues simplemente se divierten con lo que hacen. Los movimientos que son necesarios realizar al montar en un columpio, fomentan el sentido del equilibrio y la consciencia de uno mismo en los niños: ejercitan su sensación corporal y su seguridad. Sin que la pedagogía pueda explicarlo, los niños hacen de forma automática lo correcto, ya que nada fortalece tanto su equilibrio y la percepción de sí mismos como el acto de columpiarse. Usted lo diría de otra forma: columpiarse es divertido y nos hace volar.
Los columpios Wickey son el elemento de juego perfecto para sus hijos, ya que cubrirán sus necesidades básicas, son de la mejor calidad y han sido fabricados de manera resistente y ergonómicamente a la justa medida de sus hijos. Los productos Wickey cumplen todos los requisitos de seguridad y calidad exigidos por la normativa DIN, lo que hace que cada uno de sus columpios no solo proporcione la máxima diversión, sino también la máxima seguridad y durabilidad.
En cuanto a asientos para columpio, Wickey les ofrece una amplia variedad de asientos para niños de todas las edades y con las más variopintas ideas de juego, ya sea el clásico asiento rectangular, el trapecio para los futuros gimnastas o un asiento plato para columpiarse vehemente en todas direcciones. La variedad de productos Wickey hacen del acto de columpiarse mucho más que un simple balanceo hacia delante y hacia atrás: los niños son creativos y tienen siempre nuevas ideas y, los columpios Wickey, satisfacen siempre estas necesidades. Para que sus hijos disfruten de su columpio en la compañía de sus amigos, Wickey nos trae también los columpios dobles, en los que sus hijos podrán compartir la extraordinaria sensación de volar con su mejor amigo.
El columpio es el elemento de juego clásico para divertirse al aire libre: con los columpios Wickey, sus hijos podrán disfrutar cada día del maravilloso placer de balancearse por los aires.